Rezar por los sacerdotes, que dan su vida para evangelizar

Rezar por los sacerdotes, que dan su vida para evangelizar
Posadas (Misiones), 6 Ago. 09 (AICA)
El obispo de Posadas, monseñor Juan Rubén Martínez, meditó sobre la significación del Año Sacerdotal, convocado por el papa Benedicto XVI con motivo de los 150 años de la muerte de San Juan María Vianney, el santo patrono de párrocos.
El prelado recordó que este año jubilar tiene como objetivo “promover el compromiso de renovación interior de todos los sacerdotes, para que su testimonio evangélico en el mundo de hoy sea más intenso e incisivo”.
Tras saludar a los sacerdotes por el Día del Párroco, que se celebró el pasado martes 4 de agosto, consideró que el Año Sacerdotal es “una buena oportunidad” para rezar por ellos, que “con sus dones y limitaciones humanas, buscan dar su vida para evangelizar, para servir a Dios y a sus hermanos”.
“‘El sacerdote es el amor del Corazón de Jesús’, repetía con frecuencia el santo Cura de Ars. Esta conmovedora expresión nos da pie para recordar con devoción y admiración el inmenso don que suponen los sacerdotes, no solo para la Iglesia, sino también para la humanidad misma”.
Monseñor Martínez dijo en este sentido tener presente a “todos los presbíteros que con humildad repiten cada día las palabras y los gestos de Cristo a los fieles cristianos y al mundo entero, identificándose con sus pensamientos, deseos y sentimientos, así como con su estilo de vida” y exclamó “cómo no destacar sus esfuerzos apostólicos, sus servicios infatigables y ocultos, su caridad que no excluye a nadie”.
El obispo destacó que haya 24 estudiantes formándose en el Seminario, pero recordó que esto implica “esfuerzos, dedicación de sacerdotes, inversión económica, para adecuar instalaciones y para apoyar el proceso que se va dando”.
“No dudamos en afirmar con certeza que es Dios el que acompaña esta obra con su providencia. Pero todos como Iglesia debemos sentirnos responsables, por eso me animo a pedirles que sigan rezando fuerte por nuestro Seminario y Seminaristas. Les agradezco todos los aportes, donaciones, bonos contribución que nos ayudan para sostener la formación de nuestros seminaristas. En la Evangelización de nuestra diócesis hay muchas cosas fundamentales, pero el apoyo a nuestros seminaristas sin duda nos fortalece en la esperanza”, concluyó.+

Posadas (Misiones), 6 Ago. 09 (AICA)

El obispo de Posadas, monseñor Juan Rubén Martínez, meditó sobre la significación del Año Sacerdotal, convocado por el papa Benedicto XVI con motivo de los 150 años de la muerte de San Juan María Vianney, el santo patrono de párrocos.

El prelado recordó que este año jubilar tiene como objetivo “promover el compromiso de renovación interior de todos los sacerdotes, para que su testimonio evangélico en el mundo de hoy sea más intenso e incisivo”.

Tras saludar a los sacerdotes por el Día del Párroco, que se celebró el pasado martes 4 de agosto, consideró que el Año Sacerdotal es “una buena oportunidad” para rezar por ellos, que “con sus dones y limitaciones humanas, buscan dar su vida para evangelizar, para servir a Dios y a sus hermanos”.

“‘El sacerdote es el amor del Corazón de Jesús’, repetía con frecuencia el santo Cura de Ars. Esta conmovedora expresión nos da pie para recordar con devoción y admiración el inmenso don que suponen los sacerdotes, no solo para la Iglesia, sino también para la humanidad misma”.

Monseñor Martínez dijo en este sentido tener presente a “todos los presbíteros que con humildad repiten cada día las palabras y los gestos de Cristo a los fieles cristianos y al mundo entero, identificándose con sus pensamientos, deseos y sentimientos, así como con su estilo de vida” y exclamó “cómo no destacar sus esfuerzos apostólicos, sus servicios infatigables y ocultos, su caridad que no excluye a nadie”.

El obispo destacó que haya 24 estudiantes formándose en el Seminario, pero recordó que esto implica “esfuerzos, dedicación de sacerdotes, inversión económica, para adecuar instalaciones y para apoyar el proceso que se va dando”.

“No dudamos en afirmar con certeza que es Dios el que acompaña esta obra con su providencia. Pero todos como Iglesia debemos sentirnos responsables, por eso me animo a pedirles que sigan rezando fuerte por nuestro Seminario y Seminaristas. Les agradezco todos los aportes, donaciones, bonos contribución que nos ayudan para sostener la formación de nuestros seminaristas. En la Evangelización de nuestra diócesis hay muchas cosas fundamentales, pero el apoyo a nuestros seminaristas sin duda nos fortalece en la esperanza”, concluyó.+

Autor: Mario Vargas

Catequista, estudiante de enfermería, encargado de seguridad

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